Que a un bocazas como a mí le tapen la boca, cabrea como no podeis imaginaros.
Resulta que nos preparamos un blog chachi piruli, le elegimos los colores como quien elige las cortinas del salón, con las ganas y la ilusión de llegar a china y lanzar a vacío frío del internés nuestros comentarios más o menos acertados.
Contaros por ejemplo que las luces de Suzhou hacen de sus noches días y que los chinos que hasta ahora hemos tratado (el dueño de la casa, el informático que nos puso el internet, la agente de la inmobiliaria que nos facilita los trámites burocráticos, el servicio de equipajes extraviados del aeropuerto de Pudong...) son puntuales como británicos y eficaces como alemanes, todo lo contrario a lo que hasta ahora nos habian contado, ... Cada uno tiene una experiencia y esta es la nuestra, ya llegará lo otro, ya, ...
El caso es que no podemos contaroslo, o quizá podemos de milagrito (a ver si esta entrada puedo colgarla) porque el blogspot está censurado en China, supongo que para evitar que la gente malvada ande diciendo que lo chinos son guarretes, bajitos y la tienen pequeña y se acabe haciendo mala imagen del pueblo Han. Asi que prefieren taparnos a todos la boca y que no se diga nadie nada, ni bueno ni malo. Como dirían nuestros abuelos"Hija, no hay que dar que hablar a la gente, discreción ante todo".
Bueno no sé si esta entrada funcionará, si no intentaremos abrir otro blog en otro sitio.
Un saludo del censurado, ...
miércoles, 31 de octubre de 2007
MMMMPPPPFFFFF
Dixit: antonio y marisa
lunes, 15 de octubre de 2007
Tonta nostalgia de Alemania
Que tontería,
Lo de sentir cierta meláncolia al pasear desde la cuesta Moyano subiendo por la tapia del Botánico hasta el museo del Prado y la fuente de Neptuno ya lo tenía yo por cosa lógica. Al fin y al cabo Madrid es hoy para mí algo más que un anecdótico lugar de nacimiento y si suelto una lagrimita, ahora que mi paso por la capi toca a su fin, espero que mis biógrafos y mis incondicionales sepan perdonármelo.
Especialmente en estos días en que el cielo es absolutamente azul y la luz fría del otoño acompaña los paseos, se hace más difícil decirle hasta luego a esa hermosa ciudad, a sabiendas de que en Suzhou los cielos son siempre grises, la humedad cala los huesos en invierno y el calor abrasa la piel en verano.
Lo que no esperaba es sentir algo parecido en el camino de Leonberg a Tuebingen, tomando una Heffe en el Neckarmueller o conduciendo a través de la espesa niebla mañanera, que oculta el paisaje a primera hora y después se levanta en jirones que suben desde los bosques de nombre evocador.
Y es que han sido muchos los días en los que he hecho ese camino, decenas las tardes en las que me he bebido esa Heffe, y montones de mañanas en las que, legañoso, he cruzado el bosque de Sildenfingen y al llegar arriba he parado el coche para mirar atrás y disfrutar de ese hermoso espectáculo de niebla rasgándose en las copas de los árboles, que en su día debía de poner a los romanos los pelos como escarpias cuando se aventuraban al este de Rhin.
Así que si esta tarde en Tuebingen, cuando me tome la última Heffe en el Neckarmueller, mientras las hojas recién caídas de los plátanos de la Isla floten lentas en las aguas del Neckar, si esta tarde suelto una lagrimilla también en la nostalgia de los buenos momentos que me ha prestado este país y sus alrededores (Stuttgart, Leonberg, Reutlingen, Tuebingen, Rottweil, Freiburg, Muenchen, Strasbourg, Dolomitas, Berlín, Berlín, Berlín, …), si cae esa lagrimita, digo, no me lo tengais en cuenta, un momento de debilidad lo tiene cualquiera.
El nostalgico llorica
Dixit: antonio y marisa
martes, 2 de octubre de 2007
Wo men de Jia (Nuestra keli)
Dixit: antonio y marisa